Haz frente al precio de la luz de hoy en tu hogar con estos consejos

¿Todavía no sabes cómo puedes ahorrar en tu factura de electricidad? Desde nuestro blog te damos los mejores consejos para plantar cara a los precios de la luz.

¿Quién pone el precio de la luz?

El precio de la luz se ha vuelto loco en toda Europa. Los euros ruedan en el contador sin tope y parece que nada puede pararlo de momento. En España ya se está pagando más de 180 euros el megavatio por hora. Pero, ¿Quién decide esto? ¿Quién pone el precio de la luz? Bien, el precio del kWh de luz se fija en base al resultado del mercado mayorista de electricidad de cada país o zona, tal y como explican desde Companias-de-luz.com. Pero si estas subastas se hacen en cada país o zona, ¿por qué han subido los precios en toda Europa?

Las razones son varias. La primera de ellas es la subida del precio del gas natural, el cual ha sido víctima de la pandemia de coronavirus, que también ha causado un desajuste entre la demanda y la oferta. El bono de CO2 se ha disparado, y este derecho que pagan las empresas, básicamente para poder contaminar el aire mientras efectúan su actividad económica, afecta sobre el precio de la factura. Y lo único que podía frenarlo era la aportación de las energías renovables, pero la sequía y la falta de viento han lastrado su participación en el mix energético, según señalan desde Companias-de-luz.com. Todo esto ha provocado que la factura media se eleve hasta los 77 euros.

¿Y qué pueden hacer los consumidores frente a esto? En primer lugar es muy importante comparar las tarifas de luz, ya que según la CNCM puede haber una diferencia de 200 euros al año entre la tarifa más cara y la más barata.

¿Cómo hacer frente al precio de la electricidad?

Desde Companias-de-luz.com nos dan algunos consejos para reducir el importe de nuestras facturas:

• Cambia las bombillas por otras de bajo consumo LED, ya que ahorrarás más del 77% en iluminación.
• En el caso de tener contratada la tarifa PVPC, concentra tu consumo entre las diez de la noche y las diez de la mañana, programando los electrodomésticos. También es barato consumir entre las dos de la tarde y las seis de la tarde.
• Saca el máximo rendimiento a la luz solar para evitar el uso de luz artificial.
• No subas la temperatura de la calefacción o aire acondicionado más de 21ºC en invierno. Cada grado de diferencia con la temperatura supone un incremento del 6% de gasto energético. Es malo para tu bolsillo y también para tu salud.
• Una de las principales formas de ahorro energético es el aislamiento. Se trata de asegurar que no haya fugas de temperatura en la vivienda y se consigue protegiendo fachadas, suelos, techos o paredes. Mucha de la energía que requerimos con la calefacción o el aire acondicionado se debe a que la casa tiene escapes de frío y calor y, por esta razón, no consigue mantener la temperatura adecuada.

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